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Trucos para ahorrar luz con el aire acondicionado
Conocer trucos para ahorrar luz con el aire acondicionado y ponerlos en práctica puede ser muy agradecido para el bolsillo. El primero, contar con equipos altamente eficientes, como los que ofrece Mitsubishi Electric.
La importancia de la etiqueta de eficiencia energética
Conseguir que la factura no suponga un disgusto es posible con la puesta en práctica de algunos trucos para ahorrar luz. El primer consejo básico es contar con una instalación basada en equipos de alta eficiencia energética. Preferentemente, un aire acondicionado con calificación A+++.
Mitsubishi Electric cuenta en su gama de aire acondicionado doméstico con modelos que cumplen ese requisito y que permitirán, gracias a su menor consumo, amortizar rápidamente la inversión y, a medio y largo plazo, un gran ahorro. Por ejemplo, el MSZ-LN Kirigamine Style cuenta con la más alta tecnología en lo que respecta a la eficiencia energética del compresor y, además, cuenta con la ayuda de elementos como el 3D Isee Sensor, sistema que analiza las condiciones interiores de la estancia para dirigir la climatización a la zona donde es más necesaria, consiguiendo así optimizar el confort y reducir el consumo.
El MSZ-LN Kirigamine Style de Mitsubishi Electric cuenta con la más alta tecnología en lo que respecta a la eficiencia energética del compresor y, además, cuenta con la ayuda de elementos como el 3D I¬see Sensor, sistema que consigue optimizar el confort y reducir el consumo.
Ahorrar luz programando tu aire acondicionado
Los trucos para ahorrar en casa con la instalación de aire acondicionado, además de esa primera elección de compra de un equipo con la mejor calificación de eficiencia energética, tienen su continuidad en una programación adecuada, para que el encendido y apagado se realice en los momentos precisos, evitando un exceso de tiempo de funcionamiento.
Durante el periodo de tiempo en que está en funcionamiento, se facilita el ahorro con el citado 3D Isee Sensor, tecnología que limita el gasto detectando las necesidades específicas de climatización de cada zona concreta y optimizando los caudales de aire frío para conseguir la homogeneidad y el confort total de la estancia sin un consumo superior.
La temperatura perfecta para el ahorro energético
La elección de la temperatura, así como intentar mantenerla lo más estable posible, también influye en el consumo. Se considera óptima una temperatura en verano en torno a 22-25 grados. Una reducción de ese rango puede incrementar notablemente el consumo, ya que la diferencia con la temperatura exterior será mucho mayor y, por tanto, la exigencia para las máquinas también será mucho más alta.
Un “truco” que muchos olvidan
También influye en el ahorro el mantenimiento del equipo. Con las adecuadas revisiones de todos sus componentes, así como la limpieza periódica de filtros, se consigue el óptimo funcionamiento y el consumo correcto.
Un buen aislamiento térmico
Entre los trucos para ahorrar en la factura de la luz, por lo que respecta a la climatización, está el de contar con un buen aislamiento térmico de la estancia, para evitar alteraciones en la temperatura que tienen incidencias en el consumo final.
De igual forma, aprovechar las horas de menor calor en verano para ventilar de forma natural las estancias, así como utilizar las persianas o cortinas para limitar el paso del sol en las horas con mayor exposición, contribuyen a que el esfuerzo climatizador de la instalación del aire acondicionado deba ser menor, y por tanto, también el consumo.